Conocemos a Álvaro Gago desde hace varios años, cuando contamos con su colaboración para proyectar otro de sus cortos Burbujas en la programación al mes de trabajos que llevamos a cabo con la asociación Mediterrània Audiovisual con apoyo del Instituto Valenciano de Cultura en el Teatre Arniches con el objetivo de potenciar el corto nacional dando difusión a obras de los diferentes catálogos de las CC.AA. Fue una etapa muy rica e interesante, donde pudimos disfrutar de cortos de toda España y conocer desde Alicante que tipo de historias y géneros interesaban a los cineastas. Su último trabajo es Matria, distribuido por Marvin&Wayne, un corto que se disfruta y del que se saca su jugo cada vez que lo ves y que le ha dado muchas alegrías por su paso por festivales tanto a nivel nacional como internacional. Entre los premios el Gran Premio del Jurado en el Festival de Sundance uno de los más importantes de EE.UU que dirige el actor Robert Redfort. Hemos querido hablar con él para saber más de Matria que ha sido seleccionado en la 30 Edición del Festival de Alfàs del Pi uno de los más importantes y reconocidos por los profesionales de la Comunidad Valenciana. Un trabajo que será presentado en la próxima edición de los Premios Goya pues cumple con creces las premisas que establece la Academia, y que esperamos que logre la nominación pues una de las virtudes de este corto es que visibiliza el sistema de matriarcado de la mujer gallega.
A la hora de enfrentarme a una historia, para mi es muy importante, es una cuestión personal, conocer el contexto, cuestionar cómo estoy mirando pues quiero que la mirada sea lo más honesta posible, compartir, vivir con las personas que van a formar parte de la historia para no sentir que estoy robando las imágenes y para ello necesito tiempo. – Álvaro Gago
Álvaro, ¿Cuéntanos como surge la necesidad de crear Matria?
Surge de la necesidad personal de acercarme a Francisca, como persona, conocerla mejor, su contexto, su tierra, que es también la tierra de mi abuelo y de mi padre. Si bien no nos unen lazos familiares, la relación es muy próxima, pues trabajó cuidando de mi abuelo hasta que falleció. De esta relación surge la necesidad de trasladar a la pantalla su historia, y así poco a poco articular el discurso de su vida. Es a posteriori cuando se incluye la denuncia de las condiciones laborales en el trabajo de la conservera (no es algo exclusivo de las conserveras) y del mito del matriarcado gallego.
Uno de los elementos que más llaman la atención es el punto de vista de la cámara que actúa como mero observador de la realidad de esta mujer ¿Cómo fue el trabajo de preparación del personaje antes de lanzaros a rodar?
Lo más importante fue el tiempo. Trabajamos entre dos meses y medio, tres ensayando. El primer mes y medio estuvimos los dos solos con el fin de adquirir confianza y que ella se sintiera cómoda. Ese tiempo valió también para que cogiéramos seguridad como director/actriz, para establecer nuevos códigos entre nosotros, para que ella se convenciese a si misma de que podía hacerlo; luego añadimos la cámara. Empezamos desde lo más básico, trabajando mucho sobre el error. Un paso importante fue acostumbrarla a mi voz, porque suelo hablar mucho durante las tomas a menos que el actor/actriz me pida que no lo haga. A Francisca al principio mi voz la desconcentraba, pero con el paso del tiempo se fue acostumbrando y fuimos saliendo de la burbuja y pude introducir poco a poco a personas externas y después al resto del equipo con el que compartimos comidas, paseos.. también le dedicamos mucho tiempo a conocer los espacios donde se iba a rodar la película, medir las distancias, sentir las texturas…y asociar experiencias personales de Francisca a cada una de las escenas en función de la emoción que queríamos conseguir de su personaje.
Ramona era el nombre de mi bisabuela paterna, y al parecer compartía muchas de las características del personaje central de Matria, así que de ahí nació el nombre y en un principio ese iba a ser el título del corto. Se lo cambiamos después para darle al proyecto, ya desde el título, un cariz político, comprometido, de denuncia. Francisca pidió durante el rodaje, a todo el equipo, que la llamásemos Ramona.
En esta producción te acompaña un importante equipo de trabajo y ha sido producido por Sombriza Films (tu productora) y Ringo Media ¿Qué labor ha llevado a cabo cada una de ellas? ¿Con qué empresas de servicios habéis trabajado?
La película la produce íntegramente Sombriza Films, una productora familiar donde cuento con el apoyo de mi padre y mi tío, que aunque no se dedican a este sector decidieron echarme una mano. Pero al ir creciendo el proyecto era necesario el apoyo de una empresa productora que conociera más las labores propias de producción ejecutiva del sector audiovisual, así que se lo comunique a Marvin&Wayne y decidimos contar con el apoyo de Ringo Media, que gestiona la productora Mireia Graell. Ringo se ha encargado de solicitar la ayuda a cortometraje realizado y calificar de la obra. Mireia y yo nos conocemos desde hace años y esta es una forma de ver si podemos, además de ser grandes amigos, trabajar juntos y así unir fuerzas para la producción del próximo cortometraje .
Pues a nivel de empresas locales trabajamos con:
- Filamento – empresa de iluminación
- Soundtroop – encargados de las postproducción de sonido
- Catering – restaurante ‘A Dos Piñeiros’
¿Cómo fue el proceso de lograr la financiación para sacar adelante el cortometraje?
Comenzamos con un crowdfunding que hicimos a través de Verkami donde contamos con el apoyo de 119 mecenas con los que logramos la primera pata de la financiación con 10.015€, aunque hay que tener en cuenta lo que hay que descontar el porcentaje que se lleva la plataforma y las recompensas. Con respecto a las líneas de ayudas públicas en Galicia, AGADIC, solicitamos la ayuda al talento destinadas a financiar la creación de obras más arriesgadas y que tienen difícil justificación por las vías habituales. En la actualidad son 5 ayudas por un importe de 6.000€, aunque en 2011 por ejemplo, fueron 10. Aunque no se debe de justificar el gasto del dinero, si es obligatorio la entrega de la pieza. El fallo se conoce en mayo y la pieza se debe de entregar en septiembre por lo que te obligan a rodar en verano. Es una ayuda muy concurrida, alrededor de 120 personas se presentaron este año. Además del crowdfunding y la ayuda de AGADIC, la productora invirtió dinero privado. En total el coste fue alrededor de 25.000€.
¿Y el proceso de distribución de Matria con Marvin&Wayne?
Pues yo conozco a Marvin&Wayne gracias al director Xacio Baño pues es la distribuidora que ha movido varios de sus trabajos. Como sabes a veces, trabajas la elección de una distribuidora te guías por personas de confianza y tu intuición. Ellos ya tienen el catálogo a Currican y me gusta su filosofía. Son dos chicos jóvenes que creen en el cortometraje no como un hermano menor del largometraje, sino como un medio diferente para contar una historia. Además su propuesta es muy personal, y desde el principio se hace un seguimiento conjunto, pues en su catálogo hay pocas películas. Ellos tiene la iniciativa y llevan la batuta, por su experiencia visitan mercados y asisten a multitud de festivales. Lo importante es que siempre hay un diálogo, y están pendientes, miman el trabajo, y se establece una constante comunicación. Puedes aceptar sus propuestas, o discutir y decidir lo mejor de manera conjunta. Nuestra primera opción fue Locarno, que mostraron interés pero al final no hubo suerte, después Venecia que tampoco, así que el corto al final se estrenó en España en la Seminci donde ganó, igual que en Alcine, Aguilar del Campoo y Cartagena. Después de esa primera ola en España salió al exterior con Sundance y a partir de ahí el corto ya cobró vida propia.
Una anécdota de mi experiencia en EE.UU en el Festival Sundance fue con la tribu de los Navajos y su respuesta para con la película. Ellos también son considerados una sociedad matriarcal por lo que se identificaron mucho con Matria. Estaban emocionados, porque habían conectado con las historia, las mujeres se veían reflejadas en la película, los gestos, las manos de Ramona actitudes universales que lograron el reconocimiento y la empatía del espectador.
Matria ha ganado 12 premios ya, además de participar en numerosos festivales nacionales e internacionales y tiene opción a participar en Premios Goya, ¿vas a dar el salto al largometraje?
Sí me voy a presentar a los Goya pero no es algo que me quite el sueño. Lo importante es que la película llegue al mayor número de espectadores, y si los Goya ayudan a su difusión, fantástico. El salto al largometraje es un salto obligado, pues el cortometraje tiene un mercado muy reducido. Si no fuese así seguro que el salto llegaría, pues enfrentarte a algo nuevo siempre es excitante, pero no creo que llegase ahora. Aún tengo muchas historias en la cabeza que se adaptan al formato corto y que me gustaría contar.
Cerramos este artículo con la noticia de que Matria recibe tres premios en la 30 Edición de Alfàs del Pi, segundo Mejor cortometraje, Mejor Director y el Premio del Público. Enhorabuena!!!