Proyecto USA de Miguel Herrero

12068649_10153204290337898_5587640902832327827_oEl pasado 27 de mayo se estrenaba ésta película en salas de exhibición en Madrid en la sala Artistic Metropol y en Alicante en el Cine Max de Petrer y en los Panoramis ubicado en el Puerto de Alicante. El precio de la entrada en pase único fue de 3€ pero además y al mismo tiempo como hiciera Paco León con  su Carmina mediante plataformas on-line a un precio de 2,95€ en Filmin, en Filmotech que ahora forma parte de El Corte Inglés y en Vimeo on-demand (os dejo los enlaces directos por si alguien quiere ver la película) y para llevártelo a casa en soporte DVD y Blu-Ray. Luego hablaremos de la película pero tenemos que alabar el trabajo realizado por Miguel Herrero a pesar de actuar como hombre orquesta para sacar adelante este trabajo, el apostar en hacer las cosas de manera correcta y buscar que sea un producto a rentabilizar a nivel económico. Son demasiadas obras audiovisuales las que se hacen, pero se quedan en el camino, sin sentido y sin mayor repercusión porque no son calificadas ni pasan por el ICAA por la falta de formación y de interés en aprender a hacer las cosas bien.

Quiero comenzar alabando el trabajo de distribución de Proyecto USA bajo un amplio abanico de plataformas para facilitar el visionado de su contenido. Un camino que puede ser la salida para muchas películas españolas que como ésta, no puede competir en salas por los importantes costes que conlleva una distribución que está estipulado más o menos entre un 10 o 15% del presupuesto final de la obra, un gasto a añadir muy importante, y que no pueden sufragar pequeñas producciones. Además, a todo ello se une la amplia oferta y la lucha con títulos de blockbuster como en este caso el estreno de Alicia en el espejo de James Bobin con publicidad masiva en distintos medios de comunicación. Es sin duda una solución muy factible y real a tener en cuenta porque posibilita el acceso a la película en cualquier parte del mundo y en la comodidad de su casa. Porque seamos claros, los hábitos de consumo están cambiando, Internet a posibilitado ver productos audiovisuales en un ordenador, Tablet e incluso móvil y el adaptarse a estos nuevos formatos es clave para sobrevivir. En mi caso, o prefiero ver una película en la sala de cine, pero para gustos colores.

Por supuesto, hay que evitar confundir las plataformas on-line con otro tipo de plataformas web, vía Torrent o Youtube que permite muchas cosas, pero que ha hecho mucho daño dentro del marco de una producción audiovisual. Está muy bien como medio de comunicación para los llamados «youtubers» pero no es el lugar ni la forma para la difusión legal de una película o corto, y si no lo ha hecho la empresa productora o su director, tengan por seguro que es un contenido ilegal que hay que denunciar. Concienciar de esto, está siendo un verdadero quebradero de cabeza dentro del sector, y que el público aprenda a pagar estos contenidos mucho más. Pero tendremos que hacer callos para conseguirlo. Es un trabajo de concienciar y de valorar los contenidos y el trabajo que conlleva, un trabajo que debe de ser inculcado desde que somos niños y en hacer ver que la proyección de una obra audiovisual, y eso también me lo apunto para mí, no sea jamás gratis, porque deja el producto audiovisual a la altura del betún. Pero eso ya es otro debate para otro artículo.

Pues queda claro la importancia actual del trabajo del marketing para lograr este tipo de nuevos acceso para películas que lo necesitan. Precios reducidos y la posibilidad de disfrutar de películas que no son para un público masivo para salas pero que si tiene de seguidores. Lo importante es hacer un trabajo de crear Comunidad, de seguidores, y con un trabajo continuo como hace Filmin a través de las RR.SS, pero en este caso, el trabajo se lo daría a Filmotech que se ha quedado como una Plataforma muerta que debería de ser un pilar de apoyo para toda producción española. Un espacio que centralizar y llamar la atención no con las 300 producciones que se llevan a cabo cada año pero si con ese 10% que no cuenta con recursos. Organización y trabajo para dar visibilidad porque hay verdaderas joyas. Vamos yo estaría encantada y seguro que hay más personas que opinan como yo, que no están situado en las localidades donde se producen los trabajos y no tienen acceso a verlo. Ejemplos que se me ocurre recientes sería El País del Miedo de Francisco Espada que trata sobre el bulling, El rey tuerto de Marc Crehuet, imposible de ver en Alicante, como largometrajes de animación gallegos como Meñique de Ficción Producciones o más reciente la obra Techo y Comida de Juan Miguel del Castillo con multitud de premios y un premio Goya a la Mejor Actriz (si se puede ver on-line ahora, pero no en su estreno).

Así que resumiendo, un punto positivo al equipo encargado de este trabajo en Proyecto USA. Mal en cambio está la promoción. La gente no llega a ver tu producto si no lo atraes a él, que este en una plataforma necesita de mucho trabajo y de crear contenidos en las RR.SS que es el medio más económico, por supuesto, buscar el eco en prensa con una nota y buscar el rellenar contenidos y espacios en lugares de carácter cultural. He mirado el blog de la web y el último apunte fue el 8 de octubre de 2014, y en facebook se produce en parón brutal desde el 17 de noviembre a 14 de julio de 2015 que comienzan referencias y después hay otro parón hasta el estreno actual. Esto no es nada positivo. Es necesario crear contenidos y una continuidad, actuar con cabeza de lo que se crea, y sino funciona que desaparezca, un error persistente y generalizado dentro del mundo audiovisual. Y por supuesto cuidar todo con mimo, sobre todo si consigues que te presten una sala para estrenar tu película debes de asistir o llevar a alguien que te represente. Llamar la atención y volcarte en llenar ese pase, que asistan espectadores sino carece de sentido, pues la asistencia es mínima al igual con la repercusión, lo que sucedió en Alicante, dejando una imagen en negativo en lugar de en positivo. Todo se basa en detalles esos que no se tiene en cuenta, pero que en muchos casos son elementos decisivos.

Tras tratar el tema de la distribución y promoción de Proyecto USA nos centraremos en el contenido de la película, mi opinión personal hacia la película. Pues bien está película se fraguo en una loca idea de unos veinteañeros que querían recorrer de costa a costa en coche EE.UU, con el mínimo dinero y sin un planteamiento ni ruta prefijada. Esto en principio suena a todas luces a locura, y con esa edad es comprensible, pero dar el salto después a hacer la grabación y venderse como un «documental independiente» y «road movie» pues…. aquí están los peros.

No puedo decir que no me haya gustado, porque todos los espacios que aparecen generan en mi una envidia sana, pues es un país que me atrae y repele a partes iguales por muy diferentes motivos. En cualquier caso es innegable y así lo muestran las imágenes que es un país con una amplia riqueza de escenarios tanto de ladrillo como naturales, una experiencia que seguro no olvidarán estos cuatro amigos. El problema es que no hay una estructura de historia y la expuesta no se entiende en absoluto. Falta el exponente personal propio de la road movie como el viaje que desencadena un cambio exponencial de la concepción de vida de los personajes. Aunque se consigue crear empatía con alguno de los chicos sobre todo a raíz de los acontecimientos en los que se ven envueltos, la cosa no llega a fraguar.

En los inicios hay una presentación incisiva en la figura de Miguel Herrero pero después se diluye y pierde todo el protagonismo inclusive por parte del narrador. Su función claramente es la de retratar en imágenes la experiencia del viaje y de sus compañeros pasando casi un segundo plano.  Sus compañeros en cambio tienen un protagonismo, se muestran sus opiniones ante determinados temas pero el espectador no establece un fin con respecto al mensaje expuesto.  Parece que no hay un planteamiento previo de historia, un enfoque, unos posibles objetivos, sino que todo está llevado a la pura improvisación y en un audiovisual no es nada bueno, el cine es pura mentira, y como oficio, necesita de un trabajo importante para llegar a resultados. Tienes que crear un producto pensando no en quien te conoce sino más en quien no conoce nada en absoluto la obra, crear un producto que genere interés por si mismo, y ahí es donde se ha perdido completamente el rumbo.  Tampoco encontré un camino claro en la elección de las frases, que si bien son preciosas por si mismas, no logran asentar conceptos y se pierden sobre todo al apoyar texto y voz convirtiéndose en un elemento absurdo, la ser una doble repetición para el espectador.

En cualquier caso, lo peor dentro del proceso de construcción de la película son las imágenes en vertical, fotografías incluidas sin ningún tratamiento, ni efecto, como si sucederá después que mata completamente la consistencia visual de la obra. La imagen y muchos planos se han cuidado con esmero, pero después no te lo puedes saltar a la torera metiendo fotografías o incluir en la grabación de la descripción de la altura del Empire State respecto a otros edificios, que debió de costar mucho, pero completamente innecesario.  Se podría haber utilizado cualquier recurso con los protagonistas que a la par podría haber sido gracioso.

La elección del narrador, no me parece la correcta, es negativo hacer uso de voces reconocibles como es este caso, el doblador habitual de la voz de Charlie Sheen, Luis Bajo para poner la voz a tu película. Desentona mucho, porque se personaliza demasiado, y se le atribuye un protagonismo que después que luego no es tal, pues se reduce a intervenir con los cambios de escenario, cosa que como ya hemos comentado es innecesario se puede usar el texto o la voz, no ambas cosas cuando el idioma de la película no es un obstáculo.

La película se vende como una road movie, y lo es en tanto y cuando toda la película se centra a un viaje en coche de estos cuatro amigos, pero no es capaz de general un interés necesario con respecto a la historia. El problema más grabe creo que está en relación al sonido y la banda sonora de la película. No hay una continuidad, sino que se encadenan de forma constante cortes bruscos entre la música que tiene un valor extradiegetico, las conversaciones y el propio sonido ambiente, es agotador y en algunos momentos muy molesto.  De la película, me quedo con la belleza de los lugares que visitaron sobre todo los espacios naturales frente a las ciudades y la valoración del documental como una experiencia única. Es importante alabar la constancia, el trabajo, creo que demasiado en soledad de Miguel Herrero. Un aprendizaje único que comenzó en 2012 y que conocí a través de su participación en el Fanta Elx cuando se llevó a cabo su presentación.

Sacar adelante un proyecto audiovisual, necesita de un equipo de trabajo que apoye cada una de las distintas fases del proyecto, ha debido de ser estresante cargar con tantas cosas, un proyecto audiovisual se puede comparar casi como el tener un hijo, y eso hace que haya perdido una parte de objetividad necesaria para su resolución.

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