Un paseo por la 14ª Edición del Festival de Cine de Alicante

Hace tiempo que no escribo críticas sobre películas que he visto. Muchos pensaréis que he dejado de ir al cine. No ha sido así, lo que pasa, es que de momento mi opinión ante las películas vistas no han sido ni totalmente negativas, ni positivas. Me motiva mucho el hacer mi listado anual de las películas vistas, y espero ahí desgranar cuales son las obras nacionales que más y menos he disfrutado, de momento ninguna la he disfrutado a nivel de técnica y de tema, sobre todo porque hay varias que no he podido ver,  como Amar de Esteban Crespo, pero a pesar de que estaba en 4 cines de Alicante pasó como un suspiro, y no me fue posible asistir por trabajo.  En cualquier caso, espero que en este segundo semestre del año, entre las películas que restan se encuentre mi película favorita nacional del año, pues hay varias que tengo muchas ganas de ver si resultado final después de leer distintas informaciones sobre la mismas.

Reflexionando ante el nuevo rumbo que quiero hacer con este blog, más práctico, mi reto lograr una publicación semanal con entrevistas a productores de cortometraje y largometraje, tocar temas de actualidad, y reflexionar sobre elementos relacionados con la producción y la gestión cultural, también me apetece ver mi relación con el sector y los eventos que pueda asistir exponiendo mi opinión como técnico y como aficionada.

Si bien, he hecho un resumen de los más destacado de dos festivales de la provincia de Alicante, se quedaba en el tintero, en el caso del Festival de Cine de Alicante mis impresiones en relación al programa y mi asistencia a uno de ellos.  Hace cuatro años que no me pierdo la cita, a veces asisto a más o menos cosas, pero a lo largo de los años ha habido un importante avance y cuidado en la programación que se organiza dentro del Festival de Cine de Alicante, aunque todavía no se ha logrado una masiva asistencia a sus actividades por parte de los alicantinos.

Mi primera parada este año igual que fue el año pasado fue asistir al concierto de bandas sonoras que se organiza en el ADDA por parte de la Banda de Música Municipal, una actividad donde disfruto sobre todo cuando hay una verdadera unión entre todos los instrumentos que componen la banda. Este año, si bien no eran piezas muy conocidas, de nuevo es de alabar el trabajo de los músicos alicantinos y su homenaje a uno de los cineastas más importantes que ha tenido nuestro país como ha sido el valenciano Luis García- Berlanga con una pieza final de regalo sobre la canción principal de la película Bienvenido, Míster Marshall. 

Concierto Bandas Sonoras

Mi siguiente mirada se destinó a las proyecciones.  Este año no ha habido un claro programa formativo que si ha existido en otras ocasiones, supongo por la poca asistencia en los mismos de personas interesadas, o porque este año todos los esfuerzos se han centrado en los niñ@s que han podido disfrutar en un nuevo espacio del festival, la plaza del Puerto, frente al Hotel Melia. Se ubicaron una serie de carpas en mi opinión demasiado demostrativas y donde no entiendo porque la referencia siempre es de personajes extranjeros en lugar de buscar concienciar sobre el trabajo nacional para ayudar a cambiar la opinión existente para con nuestro cine. Un error que es bastante habitual porque en éste país no tenemos conciencia de cultura propia como sucede en otros países y con la incongruencia de que los festivales se centran en contenidos sobre todo cortometrajes nacionales, donde nos estamos convirtiendo en una potencia con la obtención de un nuevo premio en el Festival de Cannes el más importante del mundo para Laura Ferrés por su trabajo Los Desheredados con el Premio Descubrimiento Leica Cine por su cortometraje de la Semana de la Crítica.

A nivel de cortos, la verdad es que no tuve mucho interés porque un porcentaje alto de los trabajos seleccionados llegaban de segunda vuelta, y ya los había visto por una u otra razón. A pesar de todo, si asistí a una de las sesiones por interés en saber el resultado final de El somni de la seua vida la productora Paella Productios realizado con un equipo 100% de la comunidad y en valenciano y del que ya había hecho un artículo. El problema fue el espacio escogido este año para las proyecciones. De nuevo la plaza del puerto en un espacio abierto y con un retroproyector. En este caso la calidad de la proyección era bastante deficiente, sobre todo se quedaban claro los trabajos realizados con más presupuesto, y con un importante trabajo de etalonaje. El sonido también fue muy deficiente y para muchos de los cineastas que se trasladaron fue un verdadero jarrón de agua fría a lo que se unió que en mayo el tiempo todavía es frío a lo que se le une la humedad de estar junto al mar. Un poco desastre a pesar de la buena voluntad sobre todo porque buscaba el acercamiento de público alicantino y turistas.  En mi opinión, es una muy buena idea, pero no para sesiones oficiales, si para pases no oficiales y largometrajes invitados o muestras el problema es que en un espacio público tienen que proyectarse obras calificadas o consideradas para todos los públicos porque sino es factible el que se ponga una queja o denuncia. Dentro del programa si habían dos sesiones no oficiales de cortometrajes pero por su temática, era una sesión de cortos de LGTB y los temas de Alicante Cinema, obras realizados por alicantinos, se opto por realizar el pase en el cine Panoramis sede del festival al igual que la Sección Oficial de Animación porque a diferencia de viene estando generalizado el corto de este género no tiene porque ser para menores.

Proyección Plaza del Puerto

Dentro del apartado de largometrajes si bien el año pasado disfrute que la película ganadora, este año, ninguna de las obras seleccionadas llamo mi atención.  Dentro de la sección de cine social, aproveché la ocasión para disfrutar de la película del valenciano Óscar Bernàcer, El Hombre que embotelló el sol sobre la historia del alcalde Pedro Zaragoza y la ciudad de Benidorm, una película que tenía pendiente de ver al no haber podido ir cuando se proyectaba en los cines Kinépolis. Me encantó en un llenó total en el Ámbito Cultural de El Corte Inglés de Alicante.

Proyección cine social Ámbito Cultural El Corte Ingles

También vi las dos películas invitadas, Mil coses que faria per tu bajo la dirección de Dídac Cervera  y el alicantino Xavier Crespo de Dacsa Producciones como productor ejecutivo. Una comedia de acción muy bien lograda con un trabajo técnico y artístico fantástico aunque con una duración excesiva y demasiada repetición de las intervenciones del protagonista para hablar directamente con el espectador y sobre todo y a nivel de guión mi queja al tratamiento del personaje femenino cuyo motivación para continuar con la relación se centra en la recuperación de un reloj de pulsera de gran coste, un rolex.  Mal. Por supuesto, se que la trama es todo el desarrollo y los líos del protagonista, pero se me quedo un mal sabor de boca, y la sensación de que el personaje masculino protagonista debía haber dado un giro y abandonar esa relación e iniciar otra con una mujer no tan superficial, en un final y giro imprevisto interesante.

La última proyección a la que asistí fue 249:la noche que una becaria encontró a Emiliano Revilla una película dirigida por Luis María Ferrández que cuenta con una parte documental y otra de ficción que trata de recrea uno de los secuestros que llevó a cabo ETA en los 80 y que no se había estrenado en salas alicantinas. Tras la proyección dos de los protagonistas los periodistas María José Sáez y Jesus Álvarez hablaron con los espectadores junto con al director y el productor de la película. Muy interesante conocer esta parte de la historia de España, en un rodaje llevado a cabo en los mismos espacios reales protagonistas de este acontecimiento. Me faltó una contextualización de la historia para poder situar al espectador sobre todo aquel que no lo ha vivido en esta historia porque aunque la película transmite de manera espléndida este acontecimiento muchos y sobre todo el futuro pierdan que fue ETA y quien era Emiliano Revilla para raptarle y pedir un rescate.

Coloquio tras la proyección

En resumen fue una semana interesante y entretenida, donde aunque en un principio la elección de cartel de este año no me había convencido, cada año se presentan cientos de trabajos, si se hizo un fantástico trabajo de imagen visual audiovisual y de imagen con las camisetas que llevaban los voluntarios.  A pesar de que tuve un inicio de festival francamente malo por culpa de un constipado, disfrute de una gala de clausura en un espacio interesante, si ponen sillas más cómodas, y con la alegría del premio dado a Mejor cortometraje a Rodrigo Sorogoyen por Madre en un trabajo fascinante que ya disfrute en su estreno en la 19 Semana de la Comunidad de Madrid y sobre todo es de agradecer la visibilidad y presencia de obras valencianas.

 

 

 

 

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